Deberías estar aquí, a punto de meterme un par de dedos para que mi húmedo sexo te cuente cuánto te he extrañado. O debería estar yo allá, escondida en tus sábanas mientras me tomo tu miel, para saber cuánto me has añorado.Pero estás allá y yo aquí, mudos, sordos, ciegos y llenos de orgullo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
¿Y ahora qué? (Ficciones mínimas)
Y ahora qué pretexto vas a poner para colarte en mis sueños y arrancarme de los brazos de Morfeo por la madrugada. Con qué excusa vas a segu...
-
Y ahora qué pretexto vas a poner para colarte en mis sueños y arrancarme de los brazos de Morfeo por la madrugada. Con qué excusa vas a segu...
No hay comentarios:
Publicar un comentario